“Siervos inútiles, reyezuelos y ciudadanos…”.

"¿Acaso da gracias al siervo porque hizo lo que se le había mandado? Pienso que no.

Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que os ha sido ordenado, decid: ``Siervos inútiles somos, pues lo que debíamos hacer, hicimos", (Lucas 17: 9-10).

Por Germán Alfonso Garcés Mariño

Chicamocha News

 

Estamos en una sociedad donde, quien no está de acuerdo, o no vota por determinada persona, automáticamente pierde sus derechos civiles… sus apreciaciones son tomadas como oposición, politiquería o revanchismo…

Igualmente, cuando se señala a una persona, bien sea por mala o buena, no hace automáticamente que las otras personas sean malas o buenas por conversión matemática; no funciona eso, de que, si él es malo, yo debo ser bueno, o de, mal de muchos, consuelo de…

De otra parte, he llegado a concluir que algunas características de los verdaderos corruptos, está en autoproclamarse adalides de la legalidad, no conozco el primer corrupto que admita que lo es. Igualmente, conozco muchos corruptos que se escudan detrás de la frase, "si tiene pruebas denuncie"; todos sabemos los alcances que ha tenido la corrupción en nuestro país, quizás un mal latinoamericano, con el cual, tristemente nos hemos acostumbrado a convivir.

Otro elemento de esta situación va acorde con lo que he referido como: "todo corrupto tiene su leguleyada", y es significativo en un país lleno de leyes, quizás construidas para justificar, más que para controlar.

Y el elemento más significativo de la corrupción o de los corruptos, es la interpretación, calificación y/o justificación, bajo la cual los ciudadanos elogian las acciones del corrupto, bajo el esquema de: "ese Man si es arrecho, no se dejó pillar" …, igual que cuando se sostiene: "robó, pero hizo".    

Quisiera resaltar cómo hemos desconocido el carácter del Servidor Público, académicamente definido como "una persona que brinda un servicio de utilidad social". Esto quiere decir que, aquello que realiza beneficia a otras personas y no genera ganancias privadas (más allá del salario que pueda percibir el sujeto por este trabajo).

La Constitución Política de 1991 estableció en el artículo 123 la definición taxativa del concepto de servidor público, determinando: "ARTICULO 123, Son servidores públicos los miembros de las corporaciones públicas, los empleados y trabajadores del Estado y de sus entidades descentralizadas territorialmente y por servicios. Los servidores públicos están al servicio del Estado y de la comunidad; ejercerán sus funciones en la forma prevista por la Constitución, la ley y el reglamento. La ley determinará el régimen aplicable a los particulares que temporalmente desempeñen funciones públicas y regulará su ejercicio".

El servidor público suele administrar recursos que son estatales y, por lo tanto, pertenecen a la sociedad. Cuando una persona con un puesto de esta naturaleza comete delitos, tales como la malversación de fondos o incurre en la corrupción de alguna forma, atenta contra la riqueza de la comunidad. Normalmente encontramos aseveraciones, (por las cuales espero no ser demandado por derechos de autor), donde se argumenta: "para eso ganamos", "cuánto hay para eso", y una muy reciente, qué tal vez ocurrió en una entidad territorial imaginaria, donde alguno de sus funcionarios o funcionarias argumenta: "a nosotros no nos radique ese chicharrón" … y así entre otras como, "quiere pasar de agache" o "ni siquiera nos votó la liguita" …  

Agudizando más la tristeza, se volvió normal ver discusiones, generalmente de funcionarios de bajo nivel jerárquico o de familiares, incluso patrocinadores de campaña, donde abiertamente adjudican contratos, licencias, permisos, exenciones o favores públicos, en los llamados "cafés de los lagartos", por aquello de la leguleyada, debo ratificar que todo esto es en el ente territorial imaginario.

Quiero hacer un paréntesis para explicar más a fondo lo de la leguleyada; es aquella figura de la cual carecían los ciudadanos representativos de antaño, donde tenían palabra, la sostenían, la hacían valer, la cumplían y era su principal activo ante la sociedad… ellos no solicitaban 15 días hábiles para dar una respuesta. Cómo se extrañan esos "Godos" y "Cachiporros", que no parcelaban su conciencia.

Ahora estamos en una sociedad llena de "doctores", sí, de esos que fácilmente se gradúan o graduamos en las calles, los medios de comunicación, la venta de minutos, los hospitales y cuanta institución pública quiere justificar el nombramiento a dedo de un mediocre.

Siendo técnico, Doctor es, según el Diccionario de la Lengua Española, RAE, m. y f. Persona que ha recibido el más alto grado académico universitario. Según la Ley 30 de diciembre 28 de 1992, Artículo 13, los programas de doctorado se concentran en la formación de investigadores a nivel avanzado, tomando como base la disposición, capacidad y conocimientos adquiridos por la persona, los niveles anteriores de formación. El doctorado debe culminar con una tesis… Artículos 19, 20 y 25…

Podríamos decir que, cuando a un funcionario público le damos la denominación de doctor, sin serlo, estaríamos siendo ignorantes e ilegales.

Pero aún más allá de eso, una característica de muchos de los funcionarios públicos, de este ente territorial imaginario, se han caracterizado por esa investidura de micro poder, bajo el cual ostentan el carácter de "Reyes o Reyezuelos", que gozan de un poder otorgado por la ciudadanía; vemos cuáles infringen las normas por ellos mismos interpuestas, vemos cómo vuelven la norma una herramienta bajo la cual tienen la potestad para eximir, o no, como parte de su poder… claro que, si otro lo hace, está mal, pero si yo lo hago es razonable…

Resulta más que insólito e injusto, ver cómo los ciudadanos, súbditos, quedan eternamente agradecidos por las acciones que en su deber y obligación han sido otorgadas por el elector primario, quien es inconsciente del poder que tiene y a cambio de ser el verdadero rey se convierte en súbdito del mandato otorgado.

Gracias Doctor por hacer lo que se le mando… ¿Lucas 17: 9-10?    

En tres ocasiones, bajo diversas circunstancias, he tenido la oportunidad de ser servidor público, y resulta irónico que siempre fui criticado por mantener puertas abiertas y atender sin cita previa a quien lo requiriere, de hecho, insistí hasta el cansancio para ratificar una y otra vez que, pese a mi voluntad académica, aún no he logrado ostentar el título de doctorado.

Veo continuamente como el servidor público y, siendo bíblico una vez más, siempre propende por los principales lugares, siempre busca exaltar, en una actitud egocentrista, propia de aquellos con la capacidad de atar altas cargas, esas mismas que ellos ni siquiera son capaces de mover con un dedo… y que sabiamente la ley ha intentado mantener en un límite entre el servidor público y la sociedad…

Este texto, guardado desde hace varios meses, cobró vigencia en donde una vez más rayamos en eso que ya hemos hablado, "que parezca legal, no significa que sea ético", y pese a que la norma contempla las limitantes hacia los altos cargos ejecutivos del sector público, se siguen presentando esos efectos monárquicos en los cuales se combina la lambonería, el compromiso, la hipocresía… que generan el contrato, la denominada orden de servicios y el tan anhelado nombramiento, así sea en provisionalidad… y vemos cómo un séquito de funcionarios se ve obligado por las circunstancias a celebrar, festejar, twittear, compartir, cuál saltimbanquis de circo, las acciones que el payaso que ejerce las funciones públicas, logradas en el mercado electoral, en que se ha transformado nuestro sistema democrático, tiene en sus haberes para mantener su figuración en la sociedad.

No se puede interpretar si estamos entre lo Quijotesco, o lo Cantinflesco…

Decíale, entre otras cosas, don Quijote, que se dispusiese a ir con él de buena gana, porque tal vez le podía suceder aventura que ganase, en quítame allá esas pajas, alguna ínsula, y le dejase a él por gobernador della. Con estas promesas y otras tales, Sancho Panza, que así se llamaba el labrador, dejó su mujer e hijos y asentó por escudero de su vecino. EL QUIJOTE (II): Sancho Panza gobernador.

"Señores Representantes: estamos pasando un momento crucial en que la humanidad se enfrenta a la misma humanidad. Estamos viviendo un momento histórico en que el hombre científica e intelectualmente es un gigante, pero moralmente es un pigmeo. La opinión mundial está tan profundamente dividida en dos bandos, aparentemente irreconciliables, que, dado el singular caso, queda en solo un voto: el voto de un país débil y pequeño puede hacer que la balanza se cargue de un lado o se cargue de otro lado. Estamos, como quien dice, ante una gran báscula: por un platillo ocupado por los Verdes y con otro platillo ocupado por los Colorados. Y ahora llego yo, que soy de peso pluma, como quien dice, y según donde yo me coloque, de ese lado seguirá la balanza.  Discurso de Cantinflas en la película "Su Excelencia"       

Cuál cree que es su papel como ciudadano en esta novela en que se escribe el futuro y el presente del pueblo, departamento o país; que minuto a minuto debemos construir, seguirá siendo siervo, súbdito o rey.

Siempre,

Mucho he repetido, hay que cambiar, "el hacer por hacer, por el saber hacer".

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Diccionario de la Lengua Española, RAE, https://dle.rae.es/doctor

Ley 30 de diciembre 28 de 1992, https://www.mineducacion.gov.co/1621/articles-86437_Archivo_pdf.pdf

Constitución Política de 1991

https://www.constitucioncolombia.com/titulo-5/capitulo-2/articulo-123

Concepto 94071 de 2020 Departamento Administrativo de la Función Pública

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