¿Quién le puso el nombre a la luna?¿Habrá sido la laguna, que de tanto verla por la noche decidió llamarla luna?¿Quién le puso el nombre al elefante?¿Habrá sido el vigilante, un día que paseaba muy campante?¿Quién les puso el nombre a las rosas?¿Quién les pone el nombre a las cosas?...
Del cuento: ¿Quién le puso el nombre a la luna?, Mirtha Golberg,
Complejo de Páramos Almorzadero
Distrito
Santanderes
Sector Cordillera Oriental
Vamos a entrar en materia, les quiero decir, que a la
pregunta: ¿quién le puso el nombre al Páramo del Almorzadero?... no tengo la
respuesta, no lo pude encontrar; sería interesante que alguien nos colaborara
en este aspecto. Hay muchos sitios, muchos lugares y muchas regiones con
excelentes y honrosos nombres, con denominaciones sorprendentes; pero con una
historia perdida, recordemos que hay quienes gustan borrar la historia para
parecer que hacen algo.
La Real Academia de la lengua, define páramo como terreno
pedregoso y desierto, llanura elevada y árida; viene del latín “Paramus”,
previo a la época de los romanos, un concepto que profundiza su significado lo
define como: “suelo pedregoso, satinado, de reciente origen volcánico y
glacial, generalmente Desprotegido…”
Y aquí empieza a hacer ruido, generalmente
desprotegido, una característica del Páramo y en especial del Páramo del Almorzadero,
territorio que constituye nuestro terruño y demuestra el límite superior de la
región del Chicamocha Medio, desplazándose hacia el nororiente. Arqueológicamente
ligado a la cultura Chitarera, distribuida desde el sur occidente de la Sierra
Nevada del Cocuy, hasta las estribaciones de Chinácota, donde, hacia 1.533, estos
guerreros detuvieron la campaña del conquistador alemán, Ambrosio Alfinger, en
lo que podríamos denominar, la primera defensa del Páramo del Almorzadero por
parte de sus habitantes.
Otro capítulo lo constituye la explotación de carbón antracítico,
la Unión Europea ha financiado trabajos históricos sobre violencia y justicia en
Colombia y algunos de sus estudios nos relatan: “El Páramo El Almorzadero se
sitúa entre los departamentos Norte de Santander y Santander, presenta un
potencial para la explotación de carbón, actividad desarrollada por diferentes
empresas desde el año 1.989.
El Páramo es de gran importancia, debido a que en este
nacen quebradas, ríos y lagunas, que alimentan las cuencas del río Servitá,
afluente del río Chicamocha y los ríos Colorado, Tabeta y Chachabrí, afluentes
del río Orinoco, conforman un sistema hídrico binacional. La conservación y
manejo sostenible de estos ecosistemas es de importancia estratégica para
Colombia y Venezuela. Se adelantó una amplia y persistente campaña que, desde 1.989, advierte sobre los conflictos e impactos ambientales que tendría
la minería en este territorio; en consecuencia, empresas como CARBORIENTE
cancelaron sus proyectos en esta importante zona. A principios de este siglo (2.004),
la empresa nacional MINALMO inició la explotación ilegal sobre las viejas minas
abandonadas. Entonces, jóvenes de diversos grupos ambientales retomaron la
tarea, que se conoció como 'Campaña en Defensa de la vida y el Páramo del
Almorzadero', convocando a todas las comunidades de la subregión”, constituyendo
una acción más de la defensa del Páramo del Almorzadero por sus pobladores.
Fenómenos de violencia han acompañado la historia
reciente del Páramo del Almorzadero, inclusive se reviven estas situaciones de
insurgencia y paramilitarismo en los documentos; Volumen Testimonial del
Informe Final de la Comisión de la Verdad, Versión digital - 28 de junio del 2.022,
1 - Cuando los pájaros no cantaban: historias del conflicto armado en Colombia.
Ahora, una situación borrosa pone en peligro la estructura
del Páramo del Almorzadero, establecer el equilibrio entre la protección del
Páramo, su entorno sistémico y su interacción con la sociedad; para lo cual se
requiere de especial cuidado en el tratamiento de estos temas, el ecosistema de
Páramo constituye un elemento de interés general, no solo para la región, sino
para la prevalencia de la especie humana y de muchas otras especies; también se
requiere interpretar, cómo los habitantes del ecosistema de Páramo forman parte
de este y no son elementos adversos o extraños; sin embargo, dentro de este
núcleo poblacional existen grupos de personas que no mantienen el Páramo como
un elemento de subsistencia y protección, sino de enriquecimiento y explotación,
económicamente, no son pobres, son aquellos poseedores de grandes extensiones
de tierras, de los cuales carecen de libertad y tradición, generalmente son
producto de la invasión de terrenos baldíos, terrenos del Estado, o producto
del desplazamiento. Debo aclarar que los habitantes del Páramo no
necesariamente tienen que ser pobres, tienen derecho a una socioeconomía
sostenible, a satisfacer sus aspiraciones de vida y a lograr un nivel de
conciliación socio ambiental, considerado como de alta calidad.
Delimitación
Participativa del Páramo del Almorzadero, actualizándonos mediante los métodos
de cartografía digital:
El complejo del Páramo del almorzadero se ubica en la
cordillera oriental, entre los departamentos de Santander y Norte de Santander,
comprende un total de 157.704,90 hectáreas, allí se registran 96 lagunas en el
departamento de Santander y 21 lagunas en lo que corresponde al departamento de
Norte de Santander. El páramo de Almorzadero se encuentra en jurisdicción de
las corporaciones, CORPONOR – Corporación Autónoma Regional de la Frontera
Nororiental (31,61%) y Corporación Autónoma de Santander – CAS (68,39%). Según
la información suministrada por el Instituto Alexander Von Humboldt, 17 municipios
tienen área dentro del páramo.
De acuerdo con una aproximación del DANE (2.018) con
datos del Censo Nacional de Población y Vivienda, en los municipios de
influencia en este páramo habitan 273.363 personas. La mayor parte de la
población se encuentra en los municipios de Chitagá, Piedecuesta y Málaga.
Los páramos gozan de protección especial desde la
Constitución Política, en este sentido se han expedido una serie de normas
orientadas a su protección, el artículo 202 de la Ley 1450 de 2.011, ordenó al
Ministerio realizar la delimitación de los ecosistemas de páramos. De igual
forma, el numeral 16 del artículo 2 del Decreto-Ley 3570 de 2.011, ordenó al
Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible delimitar los ecosistemas de
páramo mediante acto administrativo, a escala 1:25.000 y con base en estudios
técnicos, sociales, económicos y ambientales, cuya elaboración es de
competencia de las autoridades ambientales regionales con jurisdicción en el
área y requisito de ley para la delimitación, atendiendo a lo ordenado en el
artículo 173 de la Ley 1753 de 2.015, según el cual la delimitación de los
ecosistemas de páramos; existe diversidad de jurisprudencia en este aspecto; el
10 de julio de 2.017, el Ministro de Ambiente y Desarrollo Sostenible recibió
en su despacho a diferentes líderes de las comunidades asentadas al interior
del Páramo Almorzadero, iniciando lo que serían los acercamientos para el
desarrollo de esta delimitación.
Desde entonces, reuniones y seudo reuniones, conceptos, fallos
judiciales, juicios de oídas, han caracterizado dicho proceso. Vale la pena
recordar cómo nuestro primer aporte con este medio lo constituyó la columna,
Mojicones y Solón Wilches: ¿En Concepción Santander o en Chiscas y Cubará
Boyacá?, realizó una descripción metodológica de los procesos
participativos en este tema, 20 meses después lideres políticos Representantes
a la Cámara, Senadores, Diputados, Gobernadores, Alcaldes, y uno que otro
oportunista, quienes en ese momento se rasgaban las vestiduras por defender el
territorio, las comunidades y la sociedad, hoy guardan silencio sobre ese tema,
es entendible, algunos están dedicados a esconderse de la justicia, a
defenderse con artimañas, e inclusive, a explotar una tierra que ni siquiera es
suya.
Esos mismos deberían estar liderando este proceso de
delimitación del Páramo del Almorzadero, pero vemos cómo en diferentes
reuniones brillan por su ausencia; un ejemplo lo sucedido el día 3 de julio de
2.022 en el corregimiento de Pangote, municipio de San Andrés; su desinterés es
evidente, quizás ya no estamos en campaña, es posible que no haya un dinero
para eso, o simplemente no tienen la capacidad académica, intelectual y humana
para asumir el liderazgo cuando debe ser.
Las diversas actividades en defensa de este territorio se
orientan a rescatar el valor sagrado, cultural y ambiental que tiene el páramo
para todos los pueblos que viven a su alrededor. Uno de ellos es el pueblo U’
Wa, que habita en las partes bajas al costado oriental de la cordillera; otro
la prevalencia de la vida; sí, la de nosotros mismos; estamos ad-portas de
escribir un nuevo capítulo en la defensa del Páramo del Almorzadero.
Mucho he repetido, hay que cambiar, “el hacer por hacer, por el saber hacer”.
Para ampliar la información: https://almorzadero.minambiente.gov.co/index.php/datos-generales/
https://ejatlas.org