Los pasajeros de una avioneta como esta vivieron otro susto en los cielos de Málaga.
Cuando los malagueños y rovirenses apenas comenzamos a recuperarnos de la tragedia aérea en la que perdieron la vida siete personas, entre ellas seis de García Rovira; los tres pasajeros y el piloto de otra avioneta que venía procedente de Bucaramanga fueron sacudidos violentamente por los fuertes vientos que por estos días azotan la región.
De acuerdo con las informaciones suministradas a esta redacción por el alcalde de Málaga, Luis Antonio Díaz, quien se encontraba en el aeropuerto Jerónimo de Aguayo, esperando unos documentos que le traían de Bucaramanga, pasado el tiempo normal de vuelo, que es de aproximadamente media hora, comenzó a preocuparse, por lo que logró averiguar qué había pasado y fue informado del regreso de la avioneta hacia el aeropuerto de Palonegro.
La aeronave alcanzó a hacer su aproximación al aeropuerto de Málaga, pero los vientos que venían de norte a sur por el cañón del río Servitá no le permitieron mantener su curso, por lo que la determinación de regresar a Bucaramanga no se hizo esperar, dado el alto riesgo que acarreaba continuar con el procedimiento de aproximación y aterrizaje.
Un software que se descarga en el celular y permite ver el histórico de los vientos en la región, confirma la presencia de vientos de más de 50 kilómetros por hora, el viernes 3 de enero, día de esta novedad.
según el alcalde Luis Antonio Díaz, "después del accidente de la avioneta de Alas de Colombia, la demanda de pasajeros para los vuelos hacia esta región ha disminuido en un 90%, a pesar de la temporada de fiestas que se vive esta semana en Málaga, e incluso, muchas personas han cancelado sus solicitudes de cupo para volar a esta y desde esta ciudad".
